El otro día estuve leyendo en el blog de Lore las cosas que ella hacía cuando niña, de una vez que hizo un lío tremendo con una máquina de tejer... y me acordé de una cosa que me pasó una vez... lo que pasa es que no me acuerdo si ya lo conté, y ayer me pasé un largo rato releyendo mi blog (y me gustaron las entradas viejas) y no pude encontrarlo, así que bueno... si ya lo conté disculpen...
Una vez mi madre llega de la calle con un paquete enorme dentro de una bolsa... me acuerdo que por esos días yo había descubierto las -ahora lo se- toallitas higiénicas, pregunté, me respondieron con evasivas, me leí el paquete y no entendí nada, así que esta vuelta, llega mi vieja, con este paquete enorme, envuelto en un papel que pa mi era de farmacia, y yo "qué traes ahí mami?", ay nena, qué chusma, nada, nada.
MMMMMMMMMMM qué intrigaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!
Bue, lo dejó arriba de la máquina de coser, en MI pieza, y se puso a hacer sus cosas.
Yo fui, lo palpé un poquito... no ssssse.... no me podía dar cuenta. No era blando como algodón, el papel hacía mucho ruido! no pude tocar mucho... ay! y si era "algo" de eso? misterios, iba a esconderlo por ahí y nunca más iba a saber.
Adopté una actitud colaboradora, a ver si ayudándola terminaba antes y abría ese paquete de mierda. Pero no. La muy guacha, se puso a hacer otra cosa, bajo mi estricta vigilancia y nada de abrir el paquete, pa ella como si no existiera.
Es más, se metió en la cocina y se puso a cocinar!
Eso era más de lo que yo podía tolerar, así que decidí cambiar de estrategia.
Agarré el triciclo (o la bici, no se porque por la edad ya no estaba para triciclo) y me acuerdo que pensé, le paso por al lado y lo tiro sin querer así tengo la excusa perfecta para agarrarlo y tocarlo un poco mientras lo vuelvo a poner en su lugar.
Eso hice, pero el paquete, muy firme en su sitio no cayó.
OK; un paquete misterioso no me va a ganar a mi.
Directo a la pata del mueble pedal pedal pedal y... PUM
Y luego de PUM? a qué no saben qué pasó despues de PUM? Creen que despues de PUM el paquete cayó al suelo y así sin mas yo supe que tenía adentro? OBVIO que no.
Despues de PUM vino CRASH.
El CRASH más atemorizante y espantoso que oí en toda mi vida.
MIERDA!!!! Y ahora qué hago????
Lo que hice fue levantar el paquete del suelo y volverlo a poner en su lugar. La cagada es que ya no tenía exactamente la misma forma, estaba algo abollado... pero bueno... ahí lo puse y me alejé lo más que pude del triciclo y de la máquina de coser y si me hubiera podido tomar un cohete a la luna te juro que ahí nomás me iba.
Pasa un rato, llega Rob de trabajar y mi madre cual perro faldero corre a su encuentro y toda contenta le dice, a que no sabés lo que compré? Y sale rajando a la pieza a buscar el paquete!!!!!!
EL PAQUETEEEEEEEEEEE!!!! EL QUE HIZO CRASH!!!!!!!!!!!
Ay ay ay... entonces lo abre y le muestra... seis preciosas tazas de cerámica pintadas a mano, con flores, con sus correspondientes seis platos HECHOS TRIZAS.
Así nomás te lo digo... le hice mierda el juego de tazas nuevas....no quedó ni una...
Pero eso no fue lo peor.
No.
Lo peor fue que despues, mientras yo esperaba que un rayo de justicia divina me fulminara al instante o el mismísimo diablo apareciera a llevarme a los fuegos del infierno con pase directo, mi vieja dijo con un dejo de tristeza... "qué boluda, las debo hacer golpeado en el colectivo"...
Cerró paquete, tiró a la basura y acá no ha pasado nada.
Cada tanto se lo cuento y le pido perdón. Ella no se acuerda de las tazas... pero yo ese crash no me lo olvido más.